Las nuevas estrategias de Marketing requieren de innovación y de un profundo estudio del consumidor para poder llegar a ser más convincentes, atractivas y efectivas. Para ello la vieja escuela del Marketing comienza a abrazar nuevas formas de estudio de mercado apoyado en la ciencia.
El Neuromarketing es una de las ramas de la ciencia más utilizadas para conocer los caminos que toman las decisiones de los consumidores. Pero también comienza a ser una tendencia top, el uso de estrategias y técnicas de la denominada Programación Neurolingüística (PNL).
La Programación Neurolingüística (PNL) proporciona técnicas prácticas para modificar nuestra conducta en pos de un resultado más positivo ante determinadas situaciones, ayuda a analizar experiencias pasadas y aprender de ellas.
Muestra cómo tomar control de nuestra mente e identificar nuestros recursos para sacar el máximo partido de ellos. También facilita la comprensión y el conocimiento del otro, concepto de sumo valor para cuestiones personales y profesionales.
Para un mejor entendimiento de la programación Neurolingüística (PNL) vamos a exponer los 10 principios clave que sustentan la filosofía y la técnica de esta interesante tendencia:
Esta es una de las afirmaciones básicas en las que se fundamentan las estrategias PNL, pero también de las que causan más controversia.
Con la afirmación “detrás de cada comportamiento hay una intención positiva» no se está vinculando a sentir un optimismo irrefrenable ante toda persona o situación vivida.
La intención positiva basada en la PNL propone que es útil comportarse sintiendo el lado positivo de las cosas en situaciones específicas y con ciertas limitaciones. Fomenta una nueva forma de pensar y percibir lo que nos rodea para descubrir los beneficios que nos puede traer.
De esta manera en situaciones de estrés o tensión, asociar nuestros pensamientos a la intención positiva puede ayudarnos a mostrarnos más seguros y tranquilos a la hora de decidir o realizar determinadas tareas.
Otro concepto que define muy bien toda la filosofía y principios básicos de la Programación Neurolingüística (PNL).
La idea general de esta técnica se refiere al hecho que cada uno de nosotros tiene un mapa mental diferente del mundo real. Este mapa mental es fruto de nuestras experiencias y percepciones subjetivas del mundo exterior, así como de la pertinente interpretación de las mismas.
Toda la información que interiorizamos se filtra bajo el embudo de nuestras creencias, sensaciones y emociones, generando mapas que son representaciones simples de diferentes aspectos del mundo o realidad actual, denominado territorio.
¡El mapa no es el territorio! Todas las sensaciones, creencias, suposiciones… forman nuestras actitudes, comportamientos y maneras de actuar. No somos 100% objetivos y por ello debemos mirar más allá para estar más en sintonía con la realidad.
Practicar la comprensión, la escucha activa, la empatía… favorece que nuestro mapa mental se llene de gotas de realidad, siendo positivo para mejorar nuestras relaciones y la comprensión del entorno que nos rodea.
La modificación, la re-educación y la re-programación de nuestra conducta, para las técnicas PNL, es algo posible, factible y de éxito.
A través de diferentes técnicas PNL es posible aprender de los errores y añadir recursos y herramientas para mejorar nuestras acciones en determinadas situaciones.
Con esto se afirma que la conducta puede ser programada, siendo posible una mejor definición de nuestras características en busca de ser mejores y más efectivos en lo que realizamos.
En definitiva, replicando conductas de éxito en otros individuos es posible llegar a cotas de rendimiento y resultados de éxito.
¡Eso sería lo ideal! Partiendo de este pensamiento es posible alimentar nuestro cerebro de herramientas que ayuden a sacar lo mejor en cada problema que nos surja.
Según la Programación Neurolingüística, si se cree que existe una solución para cada problema hay una mayor probabilidad de que encuentre dicha solución. Esto está relacionado con el mapa que posee cada persona, ya que según cuántos caminos o alternativas posea, podrá ofrecer más o menos soluciones para la situación concreta.
A través de esta filosofía de pensamiento, nuestra conducta se refuerza para enfrentarse a los problemas. Sintiendo que se puede encontrar una solución a cada problema y tener la capacidad de intentarlo y hacerlo es una gran ventaja competitiva. Además se crea un hábito muy saludable que optimiza las variables de cada situación compleja a la que nos podamos enfrentar.
La mente y el cuerpo son partes del mismo sistema, la mente y el cuerpo ya no son vistos como entidades separadas. Uno influye en el otro y viceversa.
Nuestra fisiología tiene una tremenda influencia en nuestro estado mental y comportamiento y los pensamientos tienen efectos significativos directamente en el cuerpo.
Por lo tanto el equilibrio de cuerpo y mente debe ser el estado natural; por ejemplo, los estados físicos o mentales negativos, podemos superarlos cambiando nuestro pensamiento, fisiología o emociones (practicando yoga, haciendo ejercicio…).
Conociendo la estrecha relación entre cuerpo y mente lograremos sentirnos más seguros con un mayor control de todo nuestro yo.
La comunicación es una parte fundamental de la Programación Neurolingüística (PNL), este principio se basa en la idea que la comunicación sólo tiene sentido si el destinatario reacciona de la manera que deseamos que reaccione.
En cada comunicación que efectuamos estamos tratando de influir en las personas mediante el mensaje, la forma… una buena forma de saber si estamos haciendo llegar el mensaje de forma correcta es observar la respuesta del destinatario, en especial las actitudes no verbales.
En el caso que la respuesta a nuestro mensaje no sea la que deseamos, es imprescindible ser flexible y optar por modificar el estado natural del mensaje hasta lograr su perfecta comprensión.
Se trata de una ramificación del principio de intención positiva. En este caso, las técnicas PNL afirman que toda conducta tiene una intención positiva por parte de las personas.
No es un concepto general a seguir, más bien es un procedimiento por el cual se tienda a creer que esto sucede, con el fin de dar una oportunidad a diversas situaciones y personas.
Se genera un nuevo punto de vista ante momentos negativos, dolorosos o de máximo estrés. Es una buena forma para dar una segunda oportunidad a sensaciones y emociones negativas que nos hacen cerrarnos y no avanzar.
Como en el caso de otros principios, depende mucho del contexto y siempre con ciertos límites predefinidos.
En el anterior punto sobre la comunicación tocábamos el tema de la flexibilidad como parte fundamental para optimizar y mejorar los resultados de la misma.
La flexibilidad nos facilitará tener los recursos y herramientas necesarias para recomponer el fondo y forma de nuestro mensaje, diseñándolo para que pueda ser comprendido y obtengamos el resultado que deseamos.
Dicha flexibilidad permitirá manejar con total fluidez tanto la conducta verbal como la no verbal que forma parte de la comunicación.
La filosofía PNL no habla de fracasos maneja el término de resultados en base a las estrategias utilizadas. Cada acción o decisión que tomamos viene definida por una estrategia.
Estas estrategias dibujan nuestra conducta fruto de la experiencia, las emociones y las percepciones las cuales nos llevaran a distintos resultados.
Cuando los resultados obtenidos no son los deseados se re-educará o re-programará la estrategia utilizada por otra de más éxito con el objetivo de replicar estos éxitos en los resultados finales.
A través de este procedimiento se permite aprender de la experiencia, aumentando el conocimiento de uno mismo y sus cualidades.
Cuando insistimos en hacer algo que no funciona, la famosa frase de “ no esperes resultados diferentes si haces siempre lo mismo” cobra todo el sentido.
Los practicantes de PNL, se proponen ayudar a reconocer y modificar esos comportamientos que no son eficaces y nos hacen tropezar.
Es muy importante que nos esforcemos en cambiar de estrategia para que una determinada acción de los frutos esperados, este es el principio de la oportunidad para encontrar el mejor camino hacia el logro de nuestros objetivos.
La Programación Neurolingüística (PNL) mediante un conjunto de herramientas y técnicas, ayuda a crear una actitud y metodología de trabajo para saber cómo alcanzar metas y obtener resultados deseados. Es ideal para mejorar la comunicación propia interna de cada uno y externa hacia los demás.
Se ha convertido en una gran alternativa para mejorar tanto en la vida personal como laboral, mostrando unos resultados más que significativos.
Fuente: https://bloo.media/blog/principios-programacion-neurolinguistica-pnl/